Este domingo 1 de marzo se celebra el día de la cero discriminación, fecha establecida para luchar contra la discriminación y los estigmas que la sociedad genera, ya sea por raza, genero, identidad sexual, idioma, etc. Hay que concienciar acerca del principio de que todos los seres humanos nacemos libres e iguales y que, por lo tanto no se debe tolerar ningún tipo de discriminación por sexo, origen racial, edad, opiniones o por cualquier otra circunstancia personal o racial.

Esta conmemoración tuvo lugar por primera vez en 2013 gracias a ONUSIDA, un programa de la ONU para coordinar los esfuerzos contra el VIH. El estigma y la discriminación son actitudes y conductas injustas que están viviendo muchas personas con VIH aún habiendo concienciado a la población sobre esta enfermedad durante más de 35 años.

Este 2020 se reivindica la cero discriminación a las mujeres y a las niñas, la discriminación y la desigualdad de género continúan siendo una enorme barrera para las mujeres y las niñas.

La discriminación se sustenta en gran medida sobre los estereotipos que se han ido generando entorno a la idea que tenemos como deben comportarse los hombres y las mujeres, los papeles que deben desempeñar en el trabajo, la familia, el espacio publico e incluso como deben relacionarse entre si. A todo este conjunto de construcciones de comportamiento se les llama estereotipos de género. Cada cultura tiende a re interpretar los estereotipos de género lo que demuestra que las percepciones que tenemos sobre los hombres y las mujeres están socialmente construidas.

Existen estereotipos que se evidencian como verdades objetivas y que influyen de forma decisiva sobre las actitudes, las creencias y las conductas.

¿Qué hay que tener en cuenta para disminuir la discriminación y los estigmas en las niñas y mujeres?
  • Hay que tener en cuenta que la discriminación hacia las mujeres va a ser universal e intemporal aunque los papeles de los hombres y las mujeres vayan cambiando en cada época o cultura.
  • Hay que dejar de lado el discurso naturalista que justifica que biológica-mente las mujeres son inferiores a los hombres, al no apoyar la teoría naturalista, la jerarquía entre varones y mujeres deja de construirse.
  • No hay que confundir el género con mujer. Hablar de políticas desde la perspectiva de género o de estudios de género significa que se esta haciendo una lectura y una aplicación de las estrategias teniendo en cuenta la situación de las mujeres y los hombres.
  • Es importante que asumamos que todas las personas somos portadoras de estereotipos y transmisores de los mismos. No debemos permitir que nos impidan elegir libremente y que nos conduzcan a comportamientos discriminatorios. Hay que recordar que las únicas características innatas son las biológicas, el resto son susceptibles al cambio.

Es trabajo de todos combatir estos estigmas creados por la sociedad patriarcal empezando por un aumento de la sensibilización, apoyando a las personas que han sido objeto de discriminación y mostrar los beneficios de la diversidad cada día para que así se convierta en una costumbre de la sociedad ambigua que estamos construyendo entre todos. Vive y deja vivir, ésta es la única manera de poder liberarte de las cadenas.